Se repite la historia!!

 Buuuenas un día más!!! En la entrada de esta semana volvemos a repetir un tema ya tratado anteriormente en una de mis entradas. Volvemos a hablar sobre la gordofobia, en la entrada anterior hablaba sobre una experiencia mía y en esta voy a criticar una noticia que me saltó en las redes sociales. 

Una de las influencer que están hoy en día de moda, ha decidido publicar en sus historias la crítica a una una firma de ropa, concretamente "Roxy", en la que se mostraban diferentes cuerpos los cuales vestían diferentes trajes de baño, algo muy común de las marcas acercándose ya el verano. Esta influencer, concretamente Adriana Abenia, buscaba la opinión de sus seguidores, sobre distintos cuerpos y como la marca "fomentaba" la obesidad al aparecer una chica de talla grande en la presentación de esta colección de verano. Me gustaría destacar, de manera textual, una de las frases dichas por esta influencer al acabar su crítica hacía la marca; "Por supuesto que las personas que sufren esta enfermedad tienen derecho a vestirse, pero que no sirva de ejemplo estético a otras mujeres, da lugar a equívocos"

Para empezar, el estar gordo NO es ninguna enfermedad, es una condición física. Lo segundo, se debería dejar un poquito de lado la gordofobia para poder entender que tanto el físico como el peso de alguien no es una opinión, así podremos evolucionar como sociedad. 

Según Adriana, los gordos y las gordas no deberían estar en campañas publicitarias, pero luego somos los primeros que buscamos la igualdad y el respeto, ¿qué hipócrita todo, no? 

Fuente: propia 

Según esta chica, la marca Roxy, está fomentando malos hábitos saludables por la aparición de una chica gorda en su campaña, pero ¿qué fomenta esta influencer en sus redes sociales? Pues bien, si nos metemos en su perfil de instagram o si seguimos un poco la trayectoria de esta chica nos damos cuenta de la multitud de veces que ha propiciado el consumo de alimentos ultraprocesados, así como multitud de bebidas energéticas. Por todo lo mencionado anteriormente, podemos deducir que esta chica es gordofóbica, ya que lo que le molesta es que aparezca una persona gorda publicitando un bikini. 

Lo único que fomenta Adriana en sus redes sociales es la obsesión de los cánones de belleza impuesto por la sociedad, así como fomenta los TCA y las relaciones tóxicas con la comida. 

Volvemos a repetir el mismo tema de siempre, el estar gordo no es una enfermad, ni sinónimo de obesidad ni de una mala dieta.

El problema de todo esto es que crecemos con unos cánones ya impuestos, donde las personas son delgadas, no hay granos, pieles perfectas...el día en el que nos encontramos a alguien que no lo cumple, se produce un sentimiento de rechazo, algo muy común en nuestro día a día. 

Con todo esto quiero hacer una crítica a las distintas influencers las cuales muchas de ellas van de listas y lo único que hacen es fomentar el odio y el rechazo.